Una bicicleta cargo eléctrica es, en esencia, una bici pensada para sustituir al coche en muchos de los desplazamientos cotidianos.
Su secreto está en un cuadro reforzado y una estructura ampliada que permite transportar peso extra: desde la compra semanal hasta dos o tres niños pequeños, mochilas incluidas.
La asistencia eléctrica, con motores que suelen superar los 60 o incluso los 85 Nm de par, hace que pedalear con esa carga no sea un esfuerzo, ni en cuestas ni en trayectos largos.
Cube Longtail Hybrid 725
El fabricante alemán Cube ha sabido trasladar su experiencia en bicicletas deportivas a una cargo eléctrica que sorprende por su equilibrio.
La Cube Longtail Hybrid 725 es lo que muchos definen como un “bicicletón”: sólida, elegante y sorprendentemente fácil de conducir. El cuadro alargado integra una batería de 725 Wh, suficiente para una jornada completa de trayectos escolares, recados y trabajo sin preocuparse por la carga.
Su motor Bosch Performance Line CX ofrece hasta 85 Nm de par y una respuesta inmediata incluso con dos niños y la compra semanal a cuestas.
Lo más llamativo, sin embargo, es su One Size Concept: el diseño permite ajustar rápidamente el sillín, el manillar y la distancia entre ellos, de forma que distintos miembros de la familia puedan usarla con solo unos segundos de adaptación.
En marcha transmite una sensación de estabilidad y suavidad que muchos describen como “una alfombra mágica sobre el asfalto”.
La Cube Longtail puede equiparse con asientos infantiles traseros, alforjas, barras de sujeción y una plataforma delantera opcional para ampliar su capacidad. Es una de las opciones más completas y polivalentes del segmento.
Riese & Müller Multitinker
Si existe una marca que ha elevado las bicicletas eléctricas al nivel del lujo funcional, esa es Riese & Müller. Su modelo Multitinker es una obra de ingeniería urbana.
Compacta pero robusta, está diseñada para quienes buscan una bici premium capaz de convivir con las exigencias familiares del día a día.
Equipada con motores Bosch eBike Systems, desde el Performance Line hasta el potente Cargo Line, la Multitinker ofrece una conducción sorprendentemente ágil para su tamaño.
Su suspensión delantera, el sistema de transmisión por correa y la posibilidad de montar cambio interno Enviolo o Rohloff Speedhub la convierten en un vehículo tan suave como resistente.
Permite transportar hasta 65 kilos en la parte trasera, espacio suficiente para dos niños con sillitas y mochilas. Además, puede incorporar un portabultos delantero que amplía las opciones de carga.
Su precio, que parte en torno a los 5.799 euros, refleja la calidad de sus acabados, la durabilidad de sus componentes y una ergonomía de conducción que hace honor a su origen alemán. Es, en definitiva, una bici para quienes buscan lo mejor sin concesiones.
Decathlon ELOPS R500
La ELOPS R500 de Decathlon ha sido una de las grandes sorpresas de los últimos años. Con ella, el gigante francés ha logrado acercar el concepto de bicicleta cargo eléctrica al gran público, ofreciendo un modelo equilibrado y funcional por un precio que ronda los 2.800 euros, muy por debajo de la media del segmento.
Su diseño es limpio y sobrio, con líneas alargadas que esconden un motor trasero de 58 Nm y una batería extraíble integrada en el cuadro.
Con capacidad para llevar dos niños y equipamiento completo de seguridad: guardabarros, luces potentes, frenos hidráulicos y neumáticos reforzados.
La ELOPS R500 es una herramienta perfecta para las familias que quieren empezar a moverse de forma eléctrica sin arruinarse.
Lo mejor es su comportamiento en ciudad. Su bajo centro de gravedad y el equilibrio entre potencia y suavidad hacen que se conduzca como una bicicleta convencional, incluso cargada.
Es la prueba de que la movilidad eléctrica familiar puede ser accesible, práctica y fiable sin necesidad de gastar una fortuna.
Cannondale Cargowagen Neo 2
El fabricante estadounidense Cannondale entró en el mundo de las bicicletas cargo con una propuesta que combina potencia, estilo y versatilidad.
La Cargowagen Neo 2 destaca por su diseño compacto, su cuadro robusto y una tecnología de propulsión de primer nivel. Monta el sistema Bosch Cargo Line de 85 Nm, pensado específicamente para mover grandes cargas con naturalidad, y una batería de 725 Wh que garantiza autonomías reales de más de 100 kilómetros.
La posición de conducción es cómoda y elevada, ofreciendo buena visibilidad entre el tráfico urbano. Su suspensión delantera filtra los baches y adoquines con eficacia, mientras que los frenos hidráulicos y las ruedas de gran balón aportan seguridad en todo momento.
Además, su diseño modular permite añadir accesorios personalizados: desde barras laterales para niños hasta plataformas de carga adicionales.
Por unos 4.699 euros, la Cargowagen Neo 2 se sitúa como una de las opciones más equilibradas para quienes buscan una bici de largo recorrido, capaz de transportar peso con facilidad y estilo.
Trek Fetch+ 2
La marca estadounidense Trek, conocida por sus bicicletas de montaña y carretera, ha sabido trasladar su experiencia a la movilidad urbana. La Trek Fetch+ 2 representa su visión de la cargo bike del futuro: una longtail eléctrica ágil, divertida y muy bien construida.
Su motor Bosch Cargo Line de 85 Nm proporciona un empuje contundente incluso con dos niños y equipaje. La batería de 500 Wh es suficiente para el uso diario y puede ampliarse con una segunda unidad para doblar la autonomía.
El cuadro, de geometría deportiva, permite mantener una conducción viva y precisa, algo poco habitual en este tipo de bicicletas.
Trek ha cuidado especialmente el confort de los pequeños pasajeros, con un sistema de cajones y asientos ergonómicos que pueden adaptarse a diferentes edades.
La Fetch+ 2 transmite calidad en cada detalle y, con un precio desde 4.999 euros, compite directamente con las mejores europeas. Es ideal para familias activas que buscan un medio de transporte eficiente, pero sin renunciar al placer de pedalear.
Veloe Bosch
De origen italiano, la Veloe Bosch destaca por su elegancia y versatilidad. Es una bicicleta compacta, construida en acero cromado ligero y pensada para quienes se mueven cada día por la ciudad.
Con apenas 26 kilos de peso y 181 centímetros de largo, resulta tan manejable como una bicicleta convencional, pero con capacidad para transportar un niño detrás y hasta 20 kilos adicionales en su portaequipajes delantero.
Monta el motor Bosch Cargo Line Gen4, con asistencia hasta 25 km/h y una autonomía que puede alcanzar los 180 kilómetros con la batería de mayor capacidad.
Su conducción es suave y silenciosa, perfecta para entornos urbanos. Además, se ofrece en una gama de colores muy atractiva, algo que la convierte también en un objeto de diseño sobre ruedas.
La Veloe Bosch es una de las opciones más recomendables para familias urbanas que buscan una cargo eléctrica ligera, eficiente y con una estética que no pasa desapercibida.
Ventajas de las bicicletas cargo eléctricas para familias
Más allá de los datos técnicos, el verdadero valor de una bicicleta cargo eléctrica está en la transformación que provoca en la vida diaria.
En primer lugar, el tiempo: moverse por ciudad en bici suele ser más rápido que en coche en trayectos de menos de 5 kilómetros. Se evita el tráfico, las esperas en los semáforos y la búsqueda de aparcamiento.
A eso se suma el ahorro económico. No hay gasolina, peajes, seguros elevados ni mantenimiento costoso. Una carga completa de batería apenas cuesta unos céntimos, y los frenos o neumáticos se cambian cada muchos meses de uso intensivo.
También hay un componente emocional evidente. Para muchos padres, los trayectos al colegio se convierten en un momento de conversación, risa y complicidad.
Los niños aprenden desde pequeños a desplazarse de forma sostenible y a relacionarse con su entorno urbano de otro modo.
Y por supuesto, está el impacto ambiental. Sustituir el coche por una cargo bike para los trayectos diarios supone reducir miles de kilos de CO₂ al año.