Pensado para profesionales que cuidan su imagen de marca con un vehículo sostenible y de diseño atractivo.
Con el Renault 4 E-Tech Van, la marca francesa no solo revive el icónico «cuatro latas», sino que lo reinventa como una herramienta versátil para los profesionales urbanos del siglo XXI.
Esta furgoneta eléctrica ligera, basada en el Renault 4 E-Tech, ha sido concebida específicamente para satisfacer las necesidades del transporte profesional en entornos urbanos y periurbanos, combinando diseño, funcionalidad y eficiencia energética en un solo vehículo.
Inspirado directamente en el legendario Renault 4F, un furgón que marcó una era en los años 60 y 70, este modelo se aleja del concepto de turismo para convertirse en una verdadera herramienta de trabajo.
Homologado como vehículo N1, el Renault 4 E-Tech Van ha sido modificado desde fábrica para convertirse en un utilitario robusto, sin necesidad de adaptaciones adicionales por parte del usuario.
Una de las claves del modelo es su transformación específica realizada por Qstomize, la filial de personalización de Renault con sede en la planta de Ampere, en Maubeuge (Francia).
Esta instalación forma parte del ecosistema ElectriCity, núcleo de la estrategia eléctrica de la marca. Allí, el modelo convencional pierde sus asientos traseros para dar paso a una cabina biplaza que antecede un amplio y funcional espacio de carga.
El interior posterior ha sido diseñado con un enfoque totalmente práctico: un suelo reforzado con plástico resistente, un panel de retención y ganchos de sujeción garantizan la seguridad del material transportado.
Para facilitar el orden y la utilidad, se ha incluido un compartimento adicional bajo el suelo, con una capacidad de 55 litros, ideal para guardar el cable de carga, herramientas u otros elementos de uso cotidiano.
Las cifras confirman su utilidad: 940 dm³ (equivalentes a 1.045 litros) de volumen de carga, con una capacidad máxima de 375 kilos y una longitud útil de 1,20 metros.
Todo esto lo convierte en una solución ideal para empresas de reparto, técnicos, electricistas, autónomos o pequeños comercios que buscan un vehículo eléctrico, maniobrable y fiable para su operativa diaria.
A pesar de su diseño industrial, el Renault 4 E-Tech Van no ha perdido su carácter moderno ni su estética diferenciadora.
Aun siendo una furgoneta de trabajo, se ofrece con diversas opciones de personalización, tanto en colores de carrocería como en adhesivos exteriores, manteniendo así esa aura retro que lo conecta con su antecesor histórico y lo distingue en un mercado de utilitarios generalmente sobrio.
En el apartado mecánico, Renault ofrece dos variantes bien definidas, pensadas para cubrir diferentes perfiles de uso. La versión de acceso está equipada con un motor eléctrico de 120 CV (90 kW) y una batería de 40 kWh, que le permite alcanzar una autonomía homologada de hasta 308 kilómetros por carga.
Por su parte, la versión más capaz incorpora un propulsor de 150 CV (110 kW) y una batería de 52 kWh, con la que puede recorrer hasta 409 kilómetros sin necesidad de recarga. Ambas cifras resultan más que adecuadas para el uso urbano e interurbano, y aseguran la operativa diaria de la mayoría de los profesionales sin preocupaciones.
En cuanto a los tiempos de recarga, el Renault 4 E-Tech Van también se adapta a la rutina de trabajo. Dispone de carga bidireccional en corriente alterna de hasta 11 kW, lo que permite pasar del 15% al 80% de la batería en 2 horas y 37 minutos (en la batería pequeña) o en 3 horas y 13 minutos (en la batería grande).
Para quienes necesitan mayor velocidad, también admite carga rápida en corriente continua: 80 kW en la versión básica y hasta 100 kW en la más potente, completando el mismo ciclo de carga en apenas 30 minutos.
La condición de vehículo industrial con homologación N1 implica algunas particularidades legales. Por ejemplo, su velocidad máxima legal queda limitada a 90 km/h, y una vez cumplidos los 10 años de vida útil, estará obligado a pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) cada seis meses.
Aunque pueda parecer un detalle menor, es importante para aquellos profesionales que planean un uso intensivo y prolongado del vehículo.
En cuanto al precio, el Renault 4 E-Tech Van se sitúa en una franja competitiva dentro del segmento de utilitarios eléctricos. La versión de 40 kWh parte desde los 23.954 euros, mientras que la de 52 kWh arranca en 26.284 euros.
Estas cifras no incluyen impuestos, lo que resulta lógico considerando que este tipo de vehículos está destinado principalmente a empresas, autónomos o flotas, quienes pueden acogerse a deducciones fiscales y ayudas públicas para la electrificación de su parque móvil.
El Renault 4 E-Tech Van no es solo un guiño al pasado, sino una respuesta concreta y moderna a las necesidades de movilidad profesional en las ciudades actuales.
Con un diseño que destaca, un interior optimizado al milímetro y unas prestaciones más que solventes, este modelo encarna una nueva forma de entender el vehículo comercial eléctrico. Un utilitario con carácter, historia y, sobre todo, funcionalidad.
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