Alemania se ha dado cuenta que las ayudas a la compra de coches eléctricos son efectivas y ha vuelto a reactivarlas para impulsar las ventas.
La alarma saltó cuando Volkswagen anuncia la posibilidad de cierre de plantas en Alemania, esto ha hecho que el gobierno active las ayudas para la movilidad eléctrica.
A finales del año pasado, el Tribunal Constitucional Federal de Alemania, declaró ilegales los fondos para la protección del clima, de los que salían las subvenciones a los coches eléctricos.
El Gobierno Alemán no creo otra dotación presupuestaria para continuar con las ayudas a la compra de vehículo eléctricos y el resultado fue que las ventas cayeron.
Si, la venta de coches eléctricos va muy sujeta a las ayudas de los gobiernos, está demostrado que los países que crean incentivos, como es el caso de Noruega, consiguen acelerar la transición a la movilidad sostenible.
Desde principios de 2024 las ventas de coches eléctricos han bajado en Alemania, este dato para uno de los líderes en fabricación de coches es muy negativo. El país no se puede quedar atrás en movilidad eléctrica y para eso las ventas deben ser ágiles.
Estas ayudas van enfocadas a la compra de vehículos eléctricos por parte de las empresas, las cuales tendrán una deducción de hasta el 40 por ciento del precio. Además, se ha incrementado el límite de precio en la compra, que ahora es de 95.000 euros.