Ya tenemos los datos de matriculaciones de furgonetas eléctricas en el mes de Agosto. No te los pierdas.
España está viviendo una transformación profunda en el transporte comercial. Lejos de los rugidos tradicionales del diésel, las calles de ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia se llenan de vehículos que apenas susurran.
Son las nuevas protagonistas de la logística urbana: las furgonetas eléctricas.
En agosto de 2025 estas son las furgonetas que han conseguido al Top 10 de matriculaciones en España:
En lo más alto del ranking se posiciona la Toyota Proace. Este modelo no solo se impone por su imagen robusta y su fiabilidad heredada de la marca japonesa, sino porque ofrece una experiencia de conducción eléctrica sin sorpresas, con una autonomía más que suficiente para los trayectos urbanos y periurbanos.
Toyota, que durante años fue acusada de llegar tarde a la electrificación total, ha demostrado con la Proace que no todo es cuestión de velocidad, sino de precisión. Y en ese terreno, han afinado con nota.
Muy cerca se encuentra la Opel Vivaro, una de las sorpresas de este año. Esta furgoneta ha escalado posiciones de forma consistente gracias a su equilibrio entre capacidad de carga, tecnología a bordo y una conducción ágil incluso en zonas congestionadas.
En muchas ciudades, la Vivaro eléctrica se ha convertido en el comodín de empresas de paquetería y distribución que buscan un vehículo que no falle, que pueda operar en Zonas de Bajas Emisiones sin problemas y que ofrezca una imagen moderna.
La Peugeot e-Expert, por su parte, ha sabido capitalizar el legado de la marca francesa en el segmento de vehículos comerciales.
Su diseño, con líneas limpias pero musculosas, y una configuración interior optimizada para el trabajo diario, la hacen especialmente atractiva.
Lo interesante es cómo Peugeot ha mantenido una personalidad propia en un modelo que comparte plataforma con otras marcas del grupo Stellantis.
La e-Expert no pretende ser revolucionaria, pero sí tremendamente funcional, y en eso ha ganado adeptos.
El caso de la Renault Kangoo E-Tech es particular. Este modelo es casi una institución dentro del reparto urbano, y su versión eléctrica simplemente reafirma una hegemonía construida durante décadas.
Su tamaño compacto, su gran maniobrabilidad y la confianza que inspira la marca del rombo han sido claves para que siga siendo un referente.
Ahora, en su versión E-Tech, se beneficia además de mejoras tecnológicas que la posicionan como una opción avanzada, sin perder su esencia de vehículo incansable.
Ford también tiene voz en este nuevo mapa gracias a su Transit eléctrica. Aquí no hablamos solo de una adaptación, sino de una reinterpretación de uno de los vehículos comerciales más emblemáticos de la historia.
La E-Transit ofrece potencia, una cabina orientada al conductor moderno, y un comportamiento en carretera sorprendentemente dinámico para su tamaño.
Muchos escépticos han cambiado de opinión tras probarla, especialmente por su capacidad para mantener el rendimiento incluso con carga completa.
En el caso de la Citroën ë-Jumpy, encontramos un enfoque puramente práctico. Este modelo no busca destacar por extravagancias, sino por fiabilidad.
Es una furgoneta que cumple con lo prometido: entrega eléctrica estable, buena capacidad de carga y un mantenimiento relativamente bajo.
El diseño sobrio, característico de la marca, puede no enamorar a todos, pero su funcionalidad es incuestionable. Citroën ha apostado por la sensatez, y el mercado se lo ha reconocido.
Más carismática, sin duda, es la Citroën ë-Berlingo. Su propuesta ha sido especialmente bien recibida por autónomos y pequeños negocios que buscan una furgoneta versátil, compacta y con el toque simpático de Citroën.
Su interior modular, su facilidad de carga y su diseño accesible la convierten en una aliada ideal para moverse por zonas urbanas.
La ë-Berlingo no pretende competir con las grandes, sino con las inteligentes elecciones del día a día. Y lo hace con estilo.
Fiat entra en esta lista con la E-Doblò, un modelo que ha sabido reinventarse para adaptarse a los tiempos sin perder su carácter.
Su enfoque mediterráneo, tanto en diseño como en funcionalidad, le da una personalidad propia dentro de un mercado que a veces peca de uniformidad.
La E-Doblò se siente cómoda entre repartos cortos, clientes que valoran la estética pero no renuncian a lo esencial, y empresas que buscan algo distinto sin comprometer la eficiencia.
Uno de los nombres que más llama la atención en esta lista es sin duda el de la Volkswagen ID.Buzz. Lejos de ser una simple furgoneta, este modelo es un homenaje moderno a la mítica Kombi, pero con toda la tecnología eléctrica de vanguardia.
Su diseño retro-futurista la hace destacar en cualquier calle, pero su éxito no se limita a la estética: es cómoda, amplia, bien equipada y con una autonomía que permite soñar con viajes más largos.
En un mercado donde muchas furgonetas se parecen entre sí, la ID.Buzz ofrece personalidad. Y eso, en tiempos de electrificación masiva, no es poca cosa.
Finalmente, aparece la Renault Trafic E-Tech, una apuesta para quienes necesitan algo más de volumen sin pasarse al formato camión.
La Trafic se mantiene fiel a su esencia, pero ahora con una propulsión limpia que no compromete el rendimiento.
Ha sido bien recibida entre empresas de mudanzas, logística regional y profesionales que necesitan espacio sin renunciar a la movilidad urbana.
Renault, en este modelo, demuestra que la electrificación puede ser compatible con el trabajo pesado.
Todas estas furgonetas comparten una misma misión: demostrar que la logística urbana y el reparto de última milla pueden ser sostenibles, eficientes y rentables.
Pero más allá de los datos y cifras, lo que se respira en este sector es un cambio de mentalidad. Ya no se elige una furgoneta solo por su capacidad, sino también por el ahorro en combustible que se puede tener con un vehículo eléctrico.
Y en ese nuevo tablero, estas diez furgonetas eléctricas se han ganado, por derecho propio, un lugar privilegiado.
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