La empresa municipal de transporte (EMT) de Valencia firma un préstamo de 69 millones con el el Banco Europeo de Inversiones para comprar 145 autobuses eléctricos.
La intención de la EMT de Valencia es dar un gran paso para la mejora de calidad de vida de Valencia y el proceso de cambio del transporte público hacia la movilidad sostenible está siendo uno de los pasos a seguir.
Para 2028 hay una previsión de que circulen por las calles de Valencia 215 autobuses eléctricos, de una flota de 527. El cambio seguirá año tras año hasta hacer desaparecer del medio de transporte público vehículos contaminantes.
De igual modo se implementarán puntos de carga específicos para los autobuses eléctricos con el dinero concedido por el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
El organismo del BEI ese el encargado de financiar proyectos para dar el paso a un transporte más sostenible mediante la movilidad eléctrica. Todo forma parte de la hoja de ruta europea propuesta por el acuerdo del Banco del Clima el Pacto Verde Europeo.
Este programa establece la prioridad de invertir en la transformación del transporte público en las ciudades europeas. Seguro, accesible, verde y eficiente son los cuatro pilares clave e interdependientes del transporte sostenible.
El BEI ha presentado una financiación para España en 2023 de 11.400 millones de euros, de los cuales la mitad ha sido destinados a proyectos en zonas urbanas.
Por su parte el equipo de administración de la EMT de Valencia llegó a una cuerdo la semana pasada con el Ayuntamiento para poner en marcha tres préstamos de larga duración con un importe total de 82.795.000 euros para remodelar las instalaciones donde se encuentran los autobuses urbanos.
La inversión total para este cambio ascenderá a 171.758.554 euros, dejando clara la apuesta por parte del Ayuntamiento de un cambio necesario en el transporte público de Valencia, de igual modo están haciendo en otras ciudades de España, las cuales están adquiriendo autobuses eléctricos.