Hyundai presentará el 10 de julio su nueva berlina eléctrica que hará las delicias de los amantes de la velocidad.

Hyundai está dispuesta a dinamitar todos los prejuicios sobre lo que puede ser una berlina eléctrica con el inminente lanzamiento del Ioniq 6 N.
Un modelo que no solo lleva la electrificación deportiva a un nuevo nivel, sino que desafía directamente a los grandes referentes del segmento.
Con más de 600 caballos de potencia, una estética afilada salida casi del paddock de un circuito, y una fecha de debut marcada en rojo, el próximo 10 de julio en el Festival de la Velocidad de Goodwood, la firma surcoreana se ha propuesto que este coche no pase desapercibido. Y lo va a conseguir.
Lo que Hyundai promete con el Ioniq 6 N es mucho más que una simple berlina deportiva electrificada. Se trata de un manifiesto de intenciones.
Un paso más en su apuesta por consolidarse como un actor principal en el automovilismo de altas prestaciones, pero sin renunciar a su estrategia de electrificación.
Este modelo llega tras el notable éxito del Ioniq 5 N, que en apenas dos años ha conseguido no solo la aprobación de la crítica, sino también hitos en competición y una recepción entusiasta entre los fans del motorsport.
Este nuevo Ioniq 6 N nace con la ambición de ir incluso más allá. Según la propia marca, se trata de una berlina deportiva que ha sido diseñada bajo tres principios clave que definen la filosofía “N”: asalto en curva, capacidad en circuito y, por supuesto, coche deportivo para todos los días.
Y aunque pueda sonar como una promesa demasiado ambiciosa, los primeros datos y las imágenes reveladas hacen pensar que no están exagerando.
Desde un primer vistazo, el Ioniq 6 N impone. Su carrocería sedán, estilizada pero musculosa, ha sido intervenida a fondo para conseguir la máxima estabilidad a altas velocidades.
Guardabarros ensanchados, llantas aerodinámicas, paragolpes ventilados, difusores activos y un alerón trasero de grandes proporciones marcan el tono de una estética agresiva y funcional.
Nada de esto está ahí solo por imagen: Hyundai asegura que el desarrollo aerodinámico ha sido llevado al extremo, con tomas de aire optimizadas y un flujo de aire calculado al milímetro.
En el plano técnico, lo más impactante es, sin duda, su tren motriz. Aunque la marca todavía no ha confirmado oficialmente los números definitivos, todo apunta a que compartirá motorización con el Ioniq 5 N.
Esto significaría una potencia de 609 caballos en modo estándar, que ascendería hasta los 650 caballos al activar el modo Boost, disponible durante 10 segundos.
La capacidad de aceleración que esto podría ofrecer situaría al Ioniq 6 N en un nivel muy cercano al de superdeportivos convencionales.
La puesta a punto del chasis ha sido afinada por el equipo de Hyundai N con un enfoque puramente racing.
Cuenta con una suspensión adaptativa más firme y rebajada respecto al modelo base, frenos Brembo de alto rendimiento con discos de hasta 420 mm, vectorización de par, dirección N Signature para una respuesta directa y precisa, y un sistema de recuperación de energía ajustado a las necesidades de conducción deportiva.
Todo ello controlado por un nuevo software que promete una experiencia de conducción inmersiva y emocionante.
En cuanto a los neumáticos, el Ioniq 6 N montará de serie los Michelin Pilot Sport Cup 2 Connect, un compuesto pensado para quienes no solo buscan rendimiento en carretera, sino que quieren sacar el coche a circuito sin preocuparse por el agarre o la degradación.
Además, el coche incluirá un sistema de telemetría propio de la gama N, capaz de registrar parámetros en tiempo real y compartirlos, convirtiendo cada curva en una oportunidad para mejorar.
Desde Hyundai han sido tajantes al afirmar que este coche “revolucionará una vez más el segmento de los vehículos eléctricos de altas prestaciones”. Y no es una frase lanzada al azar.
La decisión de presentarlo en Goodwood, uno de los escenarios más emblemáticos del mundo del motor, no es casual.
Ahora bien, no todo son certezas. Aún quedan incógnitas por resolver, como la autonomía oficial o el precio. Si el Ioniq 6 N mantiene la batería del 5 N, su alcance rondaría los 450-480 km bajo ciclo WLTP, aunque este dato podría variar dependiendo de los ajustes finales.
Lo que sí está claro es que este no es un coche pensado para batir récords de eficiencia, sino para ofrecer sensaciones. Y en ese terreno, Hyundai ha demostrado saber jugar muy bien sus cartas.
La pregunta que flota en el ambiente es inevitable: ¿estamos ante el primer sedán eléctrico verdaderamente deportivo de masas?.Porque, aunque existen modelos que ya han explorado este territorio, como el Porsche Taycan o el Tesla Model 3 Performance, el Ioniq 6 N propone una fórmula distinta.
No busca ser premium ni encandilar por el lujo, sino por la autenticidad de su propuesta mecánica. Una propuesta que bebe del mundo del automovilismo sin esconderlo.
Lo que sí sabemos es que no llegará al mercado hasta 2026. Al menos en Europa. Pero el 10 fr julio en Goodwood ya podremos ver al detalle el nuevo deportivo de Hyundai.