Murcia lidera la movilidad eléctrica en el turismo español

La Región de Murcia se destaca como pionera en la adaptación del sector turístico a la movilidad eléctrica, lo que la posiciona un destino de vanguardia para los viajeros.

Esta comunidad autónoma encabeza la lista de regiones españolas con mayor porcentaje de alojamientos turísticos equipados con puntos de recarga para coches eléctricos.

El informe, elaborado por la empresa tecnológica danesa Monta, especializada en fomentar el uso de vehículos eléctricos, ofrece una visión detallada del panorama nacional en cuanto a infraestructura de recarga en el sector hotelero.

La movilidad eléctrica está redefiniendo el paisaje turístico español. Con un 23,3% de sus alojamientos turísticos equipados con puntos de recarga, la Región de Murcia se posiciona a la vanguardia de esta revolución verde.

Este dato no solo refleja un compromiso con la sostenibilidad, sino que también representa una estrategia inteligente para atraer a un segmento creciente de viajeros que optan por vehículos eléctricos.

La Comunidad de Madrid, con un 21,5% de alojamientos equipados, y el País Vasco, con un 17%, completan el podio de las regiones más preparadas para recibir a turistas con coches eléctricos.

Daniel Schwedhelm, director comercial de Monta para España, ofrece una perspectiva reveladora sobre esta tendencia. «Estamos solo al principio de la revolución eléctrica«, afirma Schwedhelm, destacando la oportunidad que esto representa para el sector turístico. Según sus previsiones, el número de vehículos eléctricos en circulación se multiplicará por 9 de aquí a 2030, lo que significa que millones de potenciales clientes elegirán destinos equipados con puntos de recarga.

Esta proyección subraya la importancia estratégica de invertir en infraestructura de recarga. Los destinos y alojamientos que se adapten rápidamente a esta nueva realidad no solo estarán contribuyendo a la sostenibilidad ambiental, sino que también estarán asegurando una ventaja competitiva crucial en los próximos años. La capacidad de ofrecer y gestionar un servicio de recarga eléctrica de vanguardia se perfila como un factor diferenciador clave en la industria turística.

El panorama actual de la movilidad eléctrica en España ofrece datos interesantes. A finales de 2023, el país contaba con 373.687 coches eléctricos, según cifras de la Comisión Europea citadas por Schwedhelm. En cuanto a la infraestructura de recarga, España dispone de 34.105 puntos de recarga de acceso público hasta junio de 2024, de acuerdo con la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE).

Sin embargo, estos datos también revelan desafíos importantes. La distribución de los puntos de recarga es desigual entre las distintas regiones, lo que podría crear «desiertos de recarga» en algunas zonas del país. Además, un dato preocupante es que, a marzo de 2024, más de 8.000 puntos de recarga estaban fuera de servicio, según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC). Esta situación subraya la necesidad no solo de instalar más puntos de recarga, sino también de asegurar su mantenimiento y funcionamiento óptimo.

A nivel urbano, el estudio de Monta también ofrece insights valiosos sobre las ciudades españolas mejor preparadas para la movilidad eléctrica en el sector turístico. Madrid lidera este ranking con un impresionante 24,4% de sus alojamientos turísticos equipados con puntos de recarga. Le siguen de cerca Bilbao, con un 23,9%, y Barcelona, con un 21,1%. Estas cifras demuestran que las grandes urbes están tomando la delantera en la adaptación a las necesidades de los viajeros con vehículos eléctricos.

Es interesante observar cómo destinos turísticos tradicionales también están haciendo esfuerzos significativos en esta dirección. Palma de Mallorca, con un 17,1% de alojamientos equipados, e Ibiza, con un 10,2%, muestran que los destinos insulares también están apostando por la movilidad eléctrica. Esto es particularmente relevante considerando los desafíos logísticos adicionales que pueden enfrentar las islas en términos de infraestructura energética.

Valencia, Sevilla y Benidorm también aparecen en posiciones destacadas en este ranking de ciudades, con porcentajes de 15,7%, 12,2% y 11,5% respectivamente. Estos datos sugieren que tanto las grandes capitales como los destinos costeros populares están reconociendo la importancia de adaptarse a las nuevas tendencias en movilidad sostenible.

La presencia de ciudades como Alicante, Córdoba, Málaga y Marbella en este ranking, aunque con porcentajes más modestos, indica que la tendencia hacia la electrificación del turismo se está extendiendo por todo el territorio nacional. Esto es una señal positiva de que el sector turístico español está tomando en serio el desafío de la sostenibilidad y la adaptación a las nuevas demandas de los viajeros.

El impacto de esta transformación va más allá del mero aspecto tecnológico. La disponibilidad de puntos de recarga en alojamientos turísticos puede influir significativamente en las decisiones de viaje de los propietarios de vehículos eléctricos.

Esto podría llevar a cambios en los patrones de turismo, favoreciendo destinos y establecimientos que ofrezcan estas facilidades. A su vez, esto podría estimular un desarrollo más equilibrado del turismo, beneficiando a regiones que tradicionalmente han estado fuera de los circuitos turísticos principales.

Además, la adopción de infraestructura de recarga por parte del sector turístico puede tener un efecto catalizador en la adopción general de vehículos eléctricos en España. Al proporcionar más puntos de recarga en destinos turísticos, se reduce la «ansiedad de autonomía» que muchos conductores experimentan con los vehículos eléctricos, especialmente en viajes largos. Esto podría animar a más personas a considerar la compra de un vehículo eléctrico, sabiendo que podrán utilizarlo cómodamente incluso en sus vacaciones.

El desafío ahora para el sector turístico español es mantener y acelerar este ritmo de adaptación. Mientras que algunas regiones y ciudades están liderando el camino, otras aún tienen un largo recorrido por delante. La colaboración entre el sector público y privado será crucial para asegurar una distribución más equitativa de la infraestructura de recarga en todo el país.