Ford quiere conquistar el mercado europeo con el lanzamiento de su nuevo Ford Puma Gen-E y entra a la guerra de los SUV de tamaño medio.
Ford sigue rediseñando sus modelos más icónicos con los que dar el paso a la nueva movilidad eléctrica. Su acertada estrategia es presentar sus nuevos coches eléctricos con sus nombres más carismáticos, como es el caso del Mustang o el Capri.
Ahora nos presentan otro de sus modelos más exitosos, el Puma, con un nuevo diseño y dando el paso a la propulsión eléctrica. Su nombre para la versión eléctrica pasa a ser Ford Puma Gen-E y viene dotado de características muy interesantes.
Estamos ante un SUV del segmento B, es decir, de tamaño mediano, con unas dimensiones de 4.21 metros de largo, 1.81 metros de ancho y 1.56 metros de alto. Dispone de un maletero trasero de 574 litros y uno pequeño en la parte de adelante de 43 litros.
El Ford Puma Gen-E resuelve las necesidades de movilidad más habituales y está dentro del segmento más demandado en Europa, donde la competencia cada vez es mayor.
Dispone de un motor de tracción delantera de 124 kW (168 CV) propulsado por una batería 43 kWh que le proporciona una autonomía de 375 kilómetros, con un consumo promedio de 13,1 kWh cada 100 kilómetros.
En la página web de Ford, el Puma eléctrico todavía no está a la venta y por tanto todavía no sabemos el precio definitivo, que es uno de los factores más importantes para determinar el éxito de este nuevo modelo de Ford.
En un principio el precio de catálogo será de 34.884,30 euros, pero saldrá con una descuento de lanzamiento de 4.300 euros lo que quedará rebajado a 30.554,30 euros.
Los fabricantes de coches están rebajando el precio de sus coches para ser mas competitivos, como hemos visto esta semana en las ofertas lanzados por Volkswagen en sus vehículos eléctricos.
Ford sigue ampliando su catálogo de coches eléctricos y el Puma viene a unirse al Ford Explorer eléctrico y al Mustang E-Mach demostrando su apuesta por el cambio a la movilidad eléctrica.
La marca americana tiene gran presencia en su país de origen y en Europa, su CEO se ha dado cuenta de que el futuro de los fabricantes de coches pasa por el coche eléctrico y después de ver el potencial de los fabricantes chinos está empezando a poner soluciones para el futuro de Ford.