El grupo Stellantis y CATL, el mayor fabricante de baterías del mundo, han anunciado la creación de una gigafactoría de baterías para coche eléctrico en Zaragoza.
Después de varios meses esperando la decisión, ha llegado la buena noticia de la inversión de 4.100 millones de euros en Zaragoza de una planta para crear baterías de LFP.
La buena noticia llegó el 10 de diciembre, CATL y Stellantis firmaron el acuerdo de creación de una empresa conjunta en España para construir una gran factoría en Zaragoza, la cual impulsará sin duda la economía, con uno de los productos más demandados como son las baterías que alimentan los coches de nueva generación.
CATL, el gigante chino de baterías y líder mundial del sector es la tercera fábrica con la que contará en Europa, tras las situadas en Alemania y Hungría. Su puesta en funcionamiento a nivel de producción se calcula para el año 2026.
La alianza es significativa para ambas partes, el Grupo Stellantis da un paso importante para proveer a los vehículos eléctricos de sus marcas con sede en Europa buscando la mejor calidad y un precio más competitivo.
Por su parte CATL sigue creciendo y expandiéndose con su producción de baterías que cada vez es más demandado y en los que van un paso por delante, liderando el sector.
La incertidumbre lleva sobrevolando desde hace más de un años cuando Stellantis solicitó de ayudas publicas para valorar la implementación de una fábrica de baterías para coche eléctricos.
El gobierno propuso unas ayudas 357 millones en subvenciones provenientes de los Perte del Vehículo Eléctrico, por encima de los 300 que el grupo aconsejaba para poder llevar a cabo la inversión.
EL conflicto desatado por los aranceles a la importación de coches chinos hizo temer la paralización del proyecto después del anuncio del gobierno chino de paralizar las inversiones en territorio europeo en lo referente al sector del coche eléctrico.
El anuncio de la renuncia del CEO de Stellantis, Carlos Tavares, a continuar dirigiendo el grupo acabó de sembrar las dudas de si la creación de la megafactoría sería realidad.
Esta noticia es sin duda bienvenida y se vislumbra luz en algo evidente que trae el cambio en las motorizaciones de los vehículos.
Europa fue pionera en las prohibiciones a los coches de combustión con un plan redactado a largo plazo. Pero cuando ha llegado el momento los fabricantes europeos se han dormido y una industria mucha más joven en automoción como la China y una marca como Tesla les han tomado la delantera.
Aún así, el gran boom del coche eléctrico está por llegar a muchos países de Europa y las inversiones en nuevas plataformas para que los fabricantes europeos consiguen crear coches eléctricos atractivos y a precios competitivos son necesarias.
De igual modo los fabricantes chinos están comenzando a crear fábricas en Europa, lo que será sin duda alguna una inversión muy importantes y una reconversión que es imparable en el sector de la fabricación de coches.
Esto afecta a todas las partes involucradas como es el caso de componentes, que en el caso de los coches de nueva generación las baterías es uno de los principales dejando atrás a los motores de combustión.